Realizaron vigilia por desaparición de Kelly

LA LIBERTAD.- "¡Kelly esperamos tu regreso!", "¡Donde quieras que estés que Dios te protega!". Este y otros carteles, son los que portaban, amigos y familiares de Kelly Cancino Novoa, una joven pacasmayina, de 22 años de edad, desaparecida hace más de un mes en la ciudad de Trujillo.

El viernes último, cientos de personas se congregaron en la Iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, en Pacasmayo para participar de una oración y una vigilia. Durante más de 3 horas sus familiares, sobre todo sus abuelitos, rezaron en el altar mayor pidiendo con lágrimas en los ojos que el Señor la protega y regrese pronto a su hogar.

Como se sabe, Kelly Cancino Novoa al momento de su desaparición, hace aproximadamente un mes, se encontraba en estado de gestación, y según refiere su madre Doris Novoa Lizardo, estaba trabajando en una tienda comercial de abarrotes.

Muy cerca de su trabajo, en la urbanización San Andrés había alquilado un cuarto-pensión donde vivía desde hace unos meses atrás. Refiere la madre, que su hija estaba a punto de recibir su titulo de Enfermera Técnica luego de haber concluido sus estudios en el Instituto Público "Guadalupe" en Guadalupe.

Depincri – Trujillo, a través del departamento de homicidios, investiga el caso. Se conoce que habría citado al enamorado de ésta, Diego Arana Castañeda, pero éste dijo que su relación con la joven habría terminado en el mes de Agosto luego de haberse enterado que se encontraba en estado de gestación pero no justamente de él, motivo por el cual decidieron concluir con la relación amorosa.

Los padres del joven enamorado confirmaron lo manifestado por su hijo, pero agregaron que en todo momento Diego está colaborando con las investigaciones que lleva a cabo la policía de la ciudad de Trujillo.

La señora Doris sostiene que su hija nunca se ausentó de su hogar. Expresa que su hija habría desparecido el día 30 de octubre, pues esa fecha era esperada por la familia para visitar a unos familiares en el distrito de Jequetepeque, pero nunca llegó.

Fue al día siguiente, el 1 de noviembre cuando la señora Doris viajó a la ciudad de Trujillo y se dirigió al cuarto que su hija alquilaba, encontrándose con la sorpresa de su desaparición.

Dijo que le parecía raro haber encontrado parte de su ropa a medio lavar, así como el cargador de su celular enchufado. Incluso el cuarto permanecía un tanto descuidado, por lo que asegura que esto le parece un tanto raro. “Si ella hubiera estado preparada para viajar o escapar, hubiese dejado algunas cosas arregladas", fue el testimonio de la madre de Kelly.