TRUJILLO.- Con dos impactos de bala, uno en el cuello y otro en la cabeza -ambos con orificio de entrada más no de salida- fue asesinado la madrugada de ayer un joven albañil luego de asistir a una fiesta en uno de los barrios más marginales del distrito de La Esperanza.
El hecho de sangre ocurrió en una de las polvorientas calles del asentamiento humano Simón Bolívar, en un local que según los vecinos no cuenta con autorización para la realización de bailes populares, menos aún para expender licor hasta altas horas de la madrugada.
Justamente una de esas fiestas se realizó el sábado último, donde jóvenes de uno y otro sexo, además de muchos menores de edad, se divertían al ritmo de las cumbias de las más conocidas orquestas nacionales.
La cerveza iba y venía. Inclusive las paredes de las casas vecinas se convirtieron en ocasionales letrinas públicas, cuyos propietarios poco o casi nada podían hacer. Ni Serenazgo de La Esperanza supo de esta actividad.
Pero también fueron partícipes de esta reunión gente de mal vivir, de delincuentes y criminales que buscaban algún pretexto para demostrar su ferocidad.
Lamentablemente, el joven albañil identificado como Henry Joel Inoñán Vásquez (18) se encontraba también en el lugar, quizá sin presagiar que su vida estaba por apagarse de una manera cruel y violenta.
De acuerdo a la versión de sus familiares, el albañil salió de su vivienda, ubicada en la manzana 9 lote 13 del asentamiento humano Virgen de la Puerta, cerca de la escena del crimen, a eso de las 11 de la noche pues un amigo le había invitado a la fiesta.
“Ya regreso viejita, voy a una fiesta que me invitaron es aquí nomás, a dos cuadras de la casa”, fueron las últimas palabras que se le escuchó decir, según cuenta su madre Virgilia Vásquez Urrutia (42), quien entre lágrimas pide justicia para su hijo.
Sin embargo, a eso de las dos de la madrugada, amigos de Henry le avisaron que había sido herido, para ir inmediatamente al lugar de la fiesta. Al llegar, vio a su hijo tirado en la pista y en medio de abundante sangre que emanaba de sus heridas.
Inmediatamente y pensando que estaba con vida, lo llevó al Hospital Regional donde los médicos solamente se encargaron de certificar su muerte.
EL CRIMEN
De acuerdo a las primeras investigaciones policiales y a la versión de testigos, el joven albañil se encontraba divirtiéndose en la fiesta junto a su amigo, a uno que solamente lo conocen con el sobre nombre de “Cólera”.
Minutos antes del crimen, el tal “Cólera” se había liado a golpes con otro sujeto y el joven albañil en su afán de defenderlo recibió como respuesta dos balazos, uno en el cuello y otro en la cabeza que le causó la muerte en forma instantánea.
Familiares de la víctima y la misma policía interrogaron al tal “Cólera”, pero éste negó conocer al albañil ni mucho menos haberse peleado en la reunión. Versión que deberá ser confrontada con otros testigos.
Henry Joel Inoñán Vásquez, el cuarto de cinco hermanos y el único varón de ellos, trabajó hace un tiempo en la Municipalidad Distrital de La Esperanza, para luego viajar a Pisco de donde regresó hace poco para dedicarse a la albañilería.
Justamente en estos días, su cuñado Levi Barrios Huanca (30) lo iba a llevar para que trabaje en la empresa Chimú Agropecuaria.
Su cuerpo fue retirado de la morgue por su padre Raimundo Inoñán de la Cruz (41) para llevarlo a su vivienda donde fue velado y luego sepultado.
Este es otro de los tantos crímenes que la policía está investigando y que los familiares de la víctima esperan que no quede en el olvido, sin capturar a él o los homicidas.
0 comentarios:
Publicar un comentario