'Gringasho' dice que lo quieren matar

TRUJILLO.- Resulta que ahora A. M. P. G. (17), el peligroso ‘Gringasho’, no conoce a su tío, Roberto Carlos Gutiérrez Guzmán (o ‘Soli’, como suelen decirme a este maleante), ni a nadie de ‘Los Malditos de Río Seco’, la banda con la que cometió sus más atroces crímenes. “Quién es el Soli –dijo–, no lo conozco yo al Soli, nunca he conocido a un tal Soli, desconozco quién será esa persona”.

En una entrevista que dio a Cuarto Poder de América Televisión desde la clandestinidad, ‘Gringasho’, procesado por asesinar a dos de sus rivales a tiros, en medio de la cruenta guerra de bandas por el cobro de cupos, expresó además que no piensa volver a la ex Floresta porque lo condenaron siendo inocente. Es resumidas cuentas, se mostró como un “angelito”.

“Cualquier que estuviera encerrado por una condena que no es culpable (…) y a mi pusieron como culpable. Quién no va a querer salir”, añadió, a través del hilo telefónico.

Asimismo, dejó entrever que el rescate que protagonizaron los tres delincuentes que entraron al reformatorio el viernes de la semana pasada no había sido planeado para liberarlo a él del encierro, sino a ‘David’, otro sicario igual de peligroso, acusado de asesinar al periodista Julio Castillo, de Virú.

“Yo vi que otros corrieron y yo salí corriendo también; yo en ningún momento he disparado a nadie. Yo solamente bajé y como me quisieron matar, entré adentro yo, pero en ningún momento yo les he disparado a matar, yo nomás solamente bajé”, declaró, descartando también así que haya atentado contra vida de ‘Peluca’ y ‘Chato Kevin’, sus rivales en el oscuro mundo del hampa trujillano. Cabe precisar que estos dos facinerosos quisieron asesinarlo a él cuando se fugaron, la tarde del 30 de diciembre del 2011, por eso se asume que, antes de irse, ‘Gringasho’ tenía la intención de cobrarse la revancha. Sin embargo, ahora niega conocerlos a ellos también y dice no saber por qué querían verlo muerto.

“Yo no entiendo por qué atentaron contra la vida de mí, ni yo me explico muy bien por qué me quisieron matar”, acotó.

Sobre las razones que lo indujeron a fugarse, dijo: “Yo me escape porque me quisieron matar, y a la firme yo tenía miedo, por eso no quería seguir acá”. Más adelante, cuando se le interrogó sobre si piensa regresar a la ex Floresta, es decir, ponerse a derecho, respondió: “No estoy dispuesto a pasar ese tiempo (los seis años de encierro en el reformatorio) porque me han dado una sentencia y yo no soy culpable”.

El reportaje incluyó también declaraciones de Carlos Ribero, administrador del centro juvenil, quien declaró que la Policía encontró una llave, al parece el duplicado que llevaron los delincuentes para el rescate. Sin embargo, en una entrevista anterior, Hipólito Dioses Mogollón, director del lugar, descartó esta posibilidad, y dijo en cambio que se usaron cizallas.

De igual modo fue entrevistada la abuelita del sicario. Desde su precaria vivienda de Río Seco, la anciana dijo que fue ella quien crió a ‘Gringasho’, y que este estudió solo hasta sexto de primaria.

Y TAMBIÉN EL DIRECTOR

Por su parte, Dioses Mogollón desmintió, no en una entrevista, sino por medio de una carta enviada a nuestra Redacción, que haya sabido sobre una posible fuga o intento de escape por parte de los internos, la cual, según los medios de prensa, iba a darse el 5 de abril (en plena semana santa), pero se vio frustrada por la Policía. Dijo además que la PNP no impidió dicho intento porque nunca existió tal.

“Desconozco totalmente la existencia, elaboración, contenido o veracidad de algún documento de Inteligencia de la PNP que hable sobre ello. Debo precisar que nunca, de manera formal o informal, se me notificó con el mismo, ni de manera personal ni en mi calidad de director. Es falso también que haya sabido de un supuesto plan de fuga y que se haya descuidado la seguridad del centro”, argumenta.

Asimismo, descarta que haya mantenido algún vínculo de amistad o cercanía particular con el adolescente infractor A. M. P. G., ‘Gringasho’, y asevera que el tratamiento que este recibía era el mismo que se otorga a todos los demás internos, sin distinción o preferencia alguna.

Líneas más abajo dice que no se le está investigando como responsable de la fuga. “Reitero que es totalmente falso que la PNP haya advertido a la Dirección o Administración del Centro Juvenil que existía riesgo de fuga, y menos aún que existía un plan para el escape del adolescente en cuestión”, añadió.

“De igual forma –continúa el documento–, es importante precisar que se ha cumplido con poner a disposición de las autoridades competentes los videos de las cámaras de seguridad del Centro Juvenil que corresponden a la fuga suscitada el 28 de abril (…) con la finalidad de colaborar y contribuir con la investigación respectiva”.

Por último, explica que, pese a las limitaciones, el personal de la ex Floresta realiza denodados esfuerzos para el cumplimiento de sus fines y la obtención de sus objetivos “siendo a la fecha una institución plenamente comprometida con la rehabilitación de reeducación de los adolescentes infractores de nuestra sociedad”.