5/15/2014


TRUJILLO.- Acabó la búsqueda del criminal de 25 años que de un balazo en la cabeza mató a su propia hermana, la mujer que lo crió desde niño, que le dio de comer y que le prestó una habitación para vivir.

Anoche, la policía lo atrapó cuando caminaba despreocupado por las calles de Los Granados de la mano de su sobrina de 20 años a quien presuntamente secuestró.

Ambos salían de cenar en un restaurante y regresaban al hotel donde pasaron la noche. Ahí iban a esperar la madrugada de hoy para embarcarse en un bus y así escapar a algún rincón de Julcán.

¿CÓMPLICES?
A las 7 y 45 de la noche, la suerte se le acabó a Bagner Rufino Olivares Goicochea. Caminaba por la cuadra 4 de la calle Llanos Zapata, cerca del parque Copérnico de Los Granados, cuando los detectives del Departamento de Investigación Criminal Este de El Porvenir le echaron el guante.

Así, en tiempo récord y sin hacer un solo disparo, resolvieron el caso, atraparon al fratricida y liberaron a Santos Maleny Olivares Gamboa, de 20 años, su sobrina, de quien el matón estaba enamorado y por quien disparó contra su propia hermana Eloisa Inés Olivares Goicochea, quién murió hoy a las 5 de la madrugada en el hospital Regional.

Sin embargo, un detalle llamó la atención de los detectives al momento de detenerlos. Y es que Bagner y Maleny caminaban de la mano y se dirigían al hotel donde habían pasado la noche después del ataque.

Al ser interrogados, la muchacha dijo que Bagner, su tío, la obligó a sostener relaciones sexuales; mientras que él asegura que son pareja desde hace 5 años y que incluso cuando estaban escondidos en el hotel tuvieron intimidad.

Lo cierto es que la tranquilidad con la que ambos fueron sorprendidos ha dejado dudas y la investigación debería ampliarse a fin de determinar si acaso ambos son cómplices o planificaron el asesinato de Eloisa Inés Olivares.

¡POR DIOS, UN MILAGRO!
En cuanto a la salud de Eloisa Inés Olivares Goicochea, esta mañana falleció producto de la grave lesión que le ocasionó el balazo en la cabeza. Hasta anoche, ella seguia tendida en la unica cama que hay dentro de la Unidad de Reanimación Cardiopulmonar del hospital Regional.

Tenía una venda en la cabeza que lucia manchada por la sangre que brotaba de los orificios por donde entró y salió la bala, y tomaba bocanadas de aire con ayuda del respirador artificial.

Sus familiares la miraban desde afuera con tristeza mientras el sinfín de intravenosas hincando sus manos y brazos les recordaba que sólo un milagro la salvaría. Y el milagro no ocurrió.

En efecto, el episodio de violencia que acabo con la vida de esta mujer de 42 años es digna de una película de terror: Tuvo como escenario su casa de Villa Paraíso en El Porvenir y como agresor nada menos que a su hermano menor, el muchacho de 25 años al que crió desde niño como si fuera su hijo.

Todo empezó el martes por la mañana cuando Eloisa Inés Olivares conversaba con su sobrina Santos Maleny Olivares Gamboa, de 20 años, quien había llegado desde Julcán hace dos meses.
En medio de las lágrimas, la muchacha le confesó que desde hace varios días era acosada por un hombre tan joven como ella quien le exigía sostener relaciones sexuales.
Cuando preguntó por la identidad del acosador, se quedó perpleja; era nada menos que su hermano Bagner Rufino Olivares Goicochea quien a su vez es tío de Maleny.
Enfurecida por el atrevimiento de su hermano menor, le reclamó y le prohibió que se le acerque. “¡Es tu sobrina, no lo entiendes, esa relación está prohibida. Si no la deja en paz me la llevaré a Julcán!”, le espetó con severidad.
Bagner, quien a inicios de mayo había cumplido 25 años, le dio la espalda y salió de la casa mostrando su rechazo a la advertencia.
Por la tarde, Eloisa Inés Olivares le volvió a aconsejar que deje en paz a su sobrina Maleny. Bagner, la escuchó y después se encerró en la habitación que ocupaba desde hace tres años, tiempo durante el cual le ayudó al esposo de su hermana en la fabricación de ladrillo.

Todos creyeron que iba a reflexionar en la oscuridad de esas cuatro paredes, pero lo que en realidad hizo es planear el secuestro de su sobrina. Entonces, sacó la pistola que guardaba debajo de la cama…

¡FRATRICIDA!
Las agujas del reloj marcaron la medianoche y en la casa de la Mz. G Lt. 6 de Villa Paraíso estaba por desatarse el infierno.

Dentro, conversaban Eloisa Inés Olivares, su esposo Eulogio Ulloa Rengifo y su sobrina Santos Maleny Olivares cuando escucharon que alguien abrió la vieja puerta de lata que da a la calle.

Era su sobrino Bagner quien se acercaba a la habitación con paso firme y una pistola en la mano derecha.

“Siempre lo conocí como un muchacho tranquilo, por eso le di trabajo en la ladrillera, me ayudaba, jamás imaginé que fuera capaz de hacer una cosa así, ni siquiera sabía que tenía una pistola escondida”, reflexionó Eulogio Ulloa con tono de desconsuelo.

Cuando llegó a la habitación, golpeó la puerta de metal con fuerza para que le abran, pero nadie le hizo caso. Furioso, dio la vuelta para meterse por la ventana.

Es en ese momento que Eulogio sale de la habitación y corre en busca de ayuda. Como la vieja puerta de metal estaba cerrada, se arrojó por la pared hacia los arbustos de la calle y fue hasta la casa de su hija Deysi Ulloa Esquivel quien vive en la misma cuadra.

“Creí que Bagner quería matarme a mí y que no le haría nada a mi esposa Inés porque es su hermana, pero cuando ya estaba con mi hija Deysi a punto de regresar a la casa escuché un disparo”, recordó Eulogio Ulloa.

Al asomarse a su casa, la puerta estaba abierta y al entrar encontraron tendida con la espalda al suelo a Eloisa Inés Olivares. Bagner, su hermano, le había disparado un tiro en la frente que le salió por la nuca.

Con ayuda de los vecinos y la policía buscaron a Bagner Olivares y a su sobrina Santos Maleny, pero no los encontraron. A lo lejos se escuchaban los gritos de una muchacha, pero estos se perdieron sin que nadie logre descubrir de dónde provenían.

A la mañana siguiente, los detectives registraron la casa y la habitación del fratricida encontrando debajo de su cama varias botellas vacías de cerveza además de dos cajas: una con balas y otra con varios cartuchos de perdigón.

“No sabía que escondía esto, siempre nos pareció un muchacho tranquilo y trabajador, por eso mi hermano (Eulogio) le permitió quedarse en su casa”, afirmó Wilfredo Ulloa ante el descubrimiento.

Mientras la policía inspeccionaba la casa del atentado criminal, el teléfono celular de Eulogio Ulloa empezó a sonar. Era Bagner Olivares quien lo llamaba. Le contestó, pero del otro lado del auricular el matón no respondió, sólo se escuchaba el silencio. (Satélite)

0 comentarios:

Publicar un comentario

CALENDARIO QATAR 2022

CALENDARIO QATAR 2022
Todos los partidos en horario de Perú

LO MÁS VISTO

ARCHIVO

CONTACTO

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *