Matan a balazos a dos delincuentes

TRUJILLO.- Agentes del Escuadrón de Emergencias se enfrentaron ayer a tiros con una salvaje banda de asaltantes a la que sorprendieron en pleno atraco a un ómnibus de la empresa El Dorado, en Paiján. Producto de la infernal balacera murió uno de los facinerosos. Este fue identificado como Alexander Huaripata Llamoga (18), miembro de la peligrosa banda ‘Los Llamogas’, que opera en todo el valle Chicama.

El violento episodio ocurrió en el Callejón de Chumpón, sector ubicado en el tramo que une Paiján con Puerto Malabrigo. Fuentes policiales informaron que los maleantes (cinco en total, entre ellos dos mujeres) abordaron el vehículo en el puerto y a mitad de viaje encañonaron al chofer para desviarlo del camino.

Por miedo a morir a balazos, a Tomás Antonio Ortiz Tamayo, de 56 años, no le quedó otra opción que obedecer la orden y entrar hacia los campos de caña. Una vez ahí, los maleantes procedieron a desvalijar a cada uno de los pasajeros.

Eran las mujeres quienes iban recolectando billeteras, dinero, relojes y celulares en unas canastas de mimbre, mientras que sus compinches, armados cada uno con revólveres, amenazaban de muerte a los ocupantes para que no ofrezcan resistencia.

Fue en ese instante que aparecieron los uniformados. A bordo de la móvil PL 7020, los agentes procedieron a intervenir. Y es que les resultó sospechoso ver el carro en un lugar donde no debía, alejado de la carretera. Pero cuando estaban ya a escasos metros del bus, los delincuentes bajaron y abrieron fuego.

Dispararon como locos, buscando alejar a las fuerzas del orden para abrirse paso y fugar, no obstante, lejos de amedrentarse, los efectivos desenfundaron también sus armas y repelieron el irracional ataque criminal.

El tiroteo duró unos cinco minutos, tiempo que a cualquiera puede parecerle corto, pero que de seguro se le hizo eterno a los pasajeros; por suerte, ninguno de ellos resultó herido. La única baja fue la de los ladrones.

Abatido, aunque todavía con signos vitales, Huaripata Llamoga acabó a un costado del vehículo con el cuerpo perforado a balazos. En su mano aún empuñaba el revólver con el que había osado enfrentarse a la Policía.

Asimismo, se arrestó a las mujeres. Las autoridades las identificaron con las iniciales L. L. H. V., de 17 años, y T. M. A., también de 17.

Huaripata fue llevado al centro de salud de la localidad, pero llegó cadáver. Nada pudieron hacer los médicos para salvarlo.

De igual modo, se supo que uno de los agentes salvó milagrosamente de morir a manos de los asaltantes. Resulta que una de las balas impactó contra la funda de su arma y le dejó una herida en la pierna, aunque nada grave. Además, el patrullero terminó también con varios orificios de bala en la carrocería.

Las menores detenidas fueron puestas a disposición del Ministerio Público, órgano que decidirá su situación en las próximas horas. Por último, se sabe que toda la Policía se encuentra ya tras los pasos de los delincuentes que fugaron. Al respecto, el jefe de la Policía en la región, coronel Róger Torres, dijo que seguirá habiendo mano dura contra el crimen organizado.